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Descubre las 13 maneras más efectivas de ahuyentar a las palomas

por | Nov 22, 2022 | Blog | 0 Comentarios

Existen diferentes maneras de ahuyentar las palomas de forma casera. Te las mostramos a continuación.

1. CDs viejos

¿No sabes qué hacer con todos los discos que has guardado durante años porque ya no se escuchan? Puedes armar un ahuyentador de palomas. Solo es cuestión de unir varios con una cuerda y colgarlos en un sitio visible. Cuando el sol refleje sobre su superficie las aves se irán volando, ya que les molesta el brillo en sus ojos.

2. Agua y picante

A ningún ave le agradan las cosas picantes, de ahí que una buena técnica para ahuyentar las palomas sea pulverizar los rincones del patio o terraza con algo que les cause malestar. No quiere decir que las envenenes con ello ni nada por el estilo, sino que solo evitarás que se acerquen al identificar ese aroma.

¿Cómo lo preparas? En un frasco coloca un chile, cayena o cualquier otra especia picante. Agrega agua y mezcla bien. Luego pon en un recipiente con spray y atomiza en los sitios en los que se posan las palomas. Ten mucho cuidado de no dañar a la fauna autóctona del lugar con esta práctica.

3. Revestimiento inclinado

Una de las mejores maneras de ahuyentar las palomas… ¡es no permitir que se posen cerca! Además, estos artilugios no son muy costosos y evitará que las aves puedan caminar ahí. Nos referimos a los revestimientos hechos en metal, PVC o madera contrachapada que, además, estén dispuestos en un ángulo de 40 a 60°.

Lo mejor de todo con esta técnica es que los revestimientos también sirven para repeler el sol y la lluvia en tus ventanas.

4. Redes

Muchos edificios colocan redes antipájaros que sirven para que ningún ave se pose en los balcones, las ventanas o las cornisas. Quizás no queden muy bonitos en cuanto a estética, pero lo bueno es que son bastante efectivos e incluso suponen una medida de seguridad si tenemos niños.

También puedes cubrir los aparatos de aire acondicionado, las chimeneas o las ventanas pequeñas con una malla de acero inoxidable.

5. Búhos y cuervos de plástico

¿Sabías que las palomas le temen a los búhos y a los cuervos? No es para menos, pues en el ambiente natural serían depredadas por ellos (sobre todo por búhos y lechuzas). Pero en lugar de conseguir un ejemplar de estas aves, lo mejor que puedes hacer es comprar de juguete, de preferencia, que sean de plástico o de metal.

Incluso algunos modelos giran la cabeza con el viento, tienen ojos reflectantes con la luz o emiten sonidos como los animales verdaderos. Es recomendable cambiar de vez en cuando la ubicación y el modelo del antipalomas para aumentar la efectividad… ¡No te olvides de que son aves muy inteligentes!

6. Objetos plateados

Si ya no tienes más CDs en casa, no te preocupes, pues puedes utilizar otros objetos que reflejen la luz, como es el caso de los utensilios de cocina hechos de metal o incluso globos plateados. El objetivo es que produzcan un destello que no agrade a las palomas y no quieran posarse en tu terraza, patio, balcón o ventana.

Asegúrate de fijar muy bien los objetos metálicos al techo de la terraza para que no caigan a la calle o hagan daño a los animales. 

7. Agua

Este es uno de los métodos para ahuyentar las palomas que requiere cierta instalación o colocar un dispositivo que riegue las plantas cada cierto tiempo (con un temporizador). El agua las espantará en seguida porque no les gusta para nada.

8. Uso de ultrasonidos

Los repelentes ultrasónicos son relativamente nuevos en el mercado y reportan una eficacia variable. Su funcionamiento es simple: emiten ondas de sonido perceptibles por las plagas, pero inocuas para los humanos. Por desgracia, el rango de escucha de las aves (sobre todo de 1 a 4 kHz) es similar al de los humanos, así que tendrás que escuchar los pitidos repelentes emitidos por la máquina.

Si tu no oyes los sonidos de la máquina, es muy seguro que la paloma tampoco.

9. Gel repelente

Los geles repelentes de pájaros tienen un funcionamiento muy básico: están pegajosos y evitan que el animal pueda posarse sobre la superficie de interés, ya sea una ventana o una terraza. En cuanto note algo pegajoso, se irá de inmediato. De todas formas, se requiere muchísimo cuidado a la hora de utilizarlos y no hay que permitir que las aves se queden atrapadas o pegadas.

Ten mucho cuidado si decides aplicar estos geles. Es posible que un pájaro quede atrapado y, de ser así, la responsabilidad sería tuya.

10. Aspersor que se active con el movimiento

Aunque esta sea un poco más cara que otras soluciones, merece la pena. Si tienes un jardín muy grande y no quieres que las palomas aniden en él, puedes instalar uno o dos aspersores de agua que se activen con el movimiento. Así, las aves serán espantadas con agua sin ser dañadas cada vez que se posen cerca del artilugio.

11. Tapar todos los recovecos externos de tu hogar

Las palomas pueden encontrar un lugar perfecto para anidar cerca o dentro de tu propia casa. Todo vale: una canaleta, una esquina del tejado, una teja mal puesta o un hueco entre paredes. Sella todo recoveco para evitar que estas aves decidan hacer de tu hogar el suyo.

12. Usar controladores biológicos

El uso de controladores biológicos consiste en emplear especies como las aves rapaces para ahuyentar a las palomas. Debido a que observan a un depredador cerca, las aves clasifican la zona como insegura y prefieren alejarse por su propia cuenta. Claro está, dicha estrategia precisa de la ayuda de un profesional en cetrería y de un ave entrenada.

Aunque la utilización de controladores biológicos son una de las formas más amenas de lidiar con las palomas, en la actualidad este tipo de estrategias no son comunes en las ciudades. De hecho, en pocos países se practica de manera activa la cetrería como control biológico.

13. Eliminar toda fuente de alimento

Si tienes un comedero para pájaros en casa, lo más probable es que las palomas lo estén utilizando para ingerir las semillas y los frutos que alberga. Por desgracia, tendrás que deshacerte de él y dejar la ornitología para otro momento. Lo mismo se aplica con el comedero del perro, el gato u otro animal. Son animales omnívoros y generalistas, así que no hacen ascos a ningún alimento.